Bueno,
como está semana la cosa va de libros y soy una fan acérrima de Harry Potter, no podía
faltar algo relacionado con su fantástica historia. Todos los que hayáis leído
alguno de ellos, sabréis que aparecen cientos de recetas mágicas a lo largo de
las novelas…y seguro que más de una vez habéis soñado con estar en el Gran
Comedor durante alguno de los banquetes y tomar alguna de ellas.
En cambio, tenía Grageas
Bertie Bott de Todos los Sabores, chicle, ranas de chocolate, empanada de
calabaza, pasteles de caldero, varitas de regaliz y otra cantidad de cosas
extrañas que Harry no había visto en su vida. Como no deseaba perderse nada,
compró un poco de todo y pagó a la mujer once sickles de plata y siete knuts
de bronce.
(Harry Potter y
la Piedra Filosofal)
Por
ello, he pensado una muy buena idea para disfrutar cocinando y a su vez, como
animación a la lectura, el plantear como llevar a cabo algunas de las recetas
secretas de Harry Potter de Hogwarts a nuestra cocina.
- Patatas,
Harry?
Harry
se quedó con la boca abierta. Los platos que había frente a él de pronto
estuvieron llenos de comida. Nunca había visto tantas cosas que le gustara
comer sobre una mesa: carne asada, pollo asado, chuletas de cerdo y de ternera,
salchichas, tocino y filetes, patatas cocidas, asadas y fritas, pudín,
guisantes, zanahorias, salsa de carne, salsa de tomate y, por alguna extraña
razón, bombones de menta.
(Harry Potter y la Piedra Filosofal)
Por
supuesto, para que a niños y adultos les haga más ilusión no va a ser algo tan
“normal” como patatas o zanahorias, sino empanada de calabaza o pasteles de
calderos. Todo es imaginación.
Para hacer las varitas de regaliz necesitáis unos
palitos de regaliz, pueden ser del color que queráis, desde lo más clásico,
hasta el arco iris entero. Yo os recomendaría que cogierais de los anchos, para
que tuvieran más consistencia, pero cualquiera sirve. Derretir un poco de
chocolate con leche o blanco y untar unos 20 cm del regaliz. Dejar enfriar en
la nevera unos 15 minutos y ¡listo!
Los pasteles de
calderos, es tan sencillo como conseguir un bote de yogurt vacío, mousse de
chocolate y un regaliz negro. Se mete el mousse en el recipiente, y se pone el
regaliz a modo de asa.
En el
caso de la empanada de calabaza, necesitaréis una plancha de hojaldre, un poco
de calabaza y algo de azúcar. La calabaza la hacéis o asada o hirviéndola y una
vez hecha la aplastáis un poco con un tenedor y le echáis azúcar al gusto. Con
un vaso hacéis redondeles en el hojaldre, echáis una cucharada de la masa de
calabaza en el centro y dobláis. Para que quede más aparente y se cierre mejor,
con un tenedor vais marcando los bordes. Hornear hasta que esté dorada la
empanadilla, unos 10-15 minutos.
Como
podéis ver es muy sencillo. Los libros de Harry Potter están llenos de magia y
los niños van a disfrutar con ella. Además, siempre dan la oportunidad, como
habéis podido ver, de llevar un poquito de esa magia a nuestra vida real. Unas
veces leyendo, otras cocinando, e incluso si os animáis organizando un partido
de quidditch en el parque.
cool.. :D
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